Dick Gregory y Muhammad Ali. |
En esta ocasión
presentamos un ensayo escrito por Dick Gregory quien es un reconocido
comediante que modificó el humor realizado por los afroamericanos en ese país,
lejos de escenificar al típico estereotipo del nigger, señalaba las ventajas y oportunidades que podían adquirir
los negros debido a la segregación racial, a partir de sus chistes ingeniosos
le otorgó a los afroamericanos un lugar no de sumisión y vejación sino de astucia
y picardía frente al blanco.
Por otra parte su
carrera como activista social es inigualable, defensor de los derechos civiles
de los afroamericanos, opositor de la guerra de Vietnam, candidato a la
presidencia de los Estados Unidos Americanos por parte del Peace and Freedom
Party (PFP), Partido Paz y Libertad; miembro de la lista de enemigos de Nixon,
orador constante a favor de la igualdad, activista en contra del apartheid (en
el Festival de Amandla, 1979), mediador ante la toma y secuestro de la embajada
estadounidense por parte de iranís (1979-1981). Sin olvidar la infinidad de huelgas de hambre
que ha realizado a lo largo de su vida en pos de sus ideales (la última realizada
en el pasado mes de abril del 2013).
El análisis de
Gregory parte del movimiento popular acaecido en el distrito de Watts, en
California; suceso conocido como la rebelión de Watts, el cual se caracterizó
por cinco días de saqueo y daños a tiendas departamentales y de
electrodomésticos por parte de la población afroamericana motivada por un acto
de arbitrariedad de parte de la policía
de Los Ángeles.
La reflexión del
motín, que nuestro autor entendió como una segunda revolución norteamericana,
parte de la premisa de que no es una revolución
de los negros sino una revolución norteamericana que pide lo
estipulado en la Declaración de Independencia y en la Constitución de los Estados
Unidos de América, al respecto señala:
El negro ama a Norteamérica y es humillado por ella. La suya no es una revolución por propiedades, sino por derechos […] Norteamérica me permitió mirar la Constitución, pero no me dejaría saborearla. Ahora, Norteamérica quiere dármela poco a poco, hasta que mi constitución esté ‘lista para aceptarla.’A la par que argumenta, de acuerdo a las leyes de los blancos, los derechos de los negros por una situación distinta de vida; señala los motivos por los que la violencia es la voz de ghetto negro:
La violencia es la voz del ghetto negro, no sólo porque las voces no violentas han sido ignoradas, burladas y silenciadas por la fuerza, sino porque la violencia es la voz que Norteamérica le ha enseñado al ghetto. Norteamérica es un maestro violento. Se asesina en nombre del Gobierno, ya que esté permite la pena capital [...] Inducimos a los jóvenes a que vayan al ejército, los instruimos en el uso de las bombas y les decimos que hacer guerra es un honor [El policía] también esta disgustado con el sistema, de la misma manera que nosotros lo estamos; nosotros y los policías descargamos nuestro enojo unos sobre otros, porque somos las únicas partes del sistema lo suficientemente cercanas para poder tocarse.
Las humillaciones como individuo,
norteamericano y negro son las aristas que definen la personalidad violenta del ghetto, aristas que a juicio de nuestro
autor debieron examinarse por la nación
estadounidense.
Dick Gregory y Martin Luther King Jr. |
Violencia La Voz Del Ghetto. Caballero Junio 1966. by ZorroCaballero
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